THE ART OF CREATIVE WRITING. Proyecto Erasmus+. Movilidad a Ramnicu Valcea. Tercera parte.
Saludos de nuevo.
Seguimos en Ramnicu Valcea con el proyecto Erasmus+ The Art of Creative Writing, y hoy también hay mucho que contar, vamos allá.
Esta mañana hemos quedado directamente en la Biblioteca Municipal de Rm Valcea, un edificio bastante nuevo que cuenta con la una impresionante vidriera que cubre el gran espacio central que conecta todas las plantas. Cuenta además con distintas salas destinadas a libros de distintas temáticas, salas de reunión, o exposición, teniendo también una amplia gama de actividades que tienen un alto grado de participación por parte de los habitantes de la ciudad y alrededores; la biblioteca colabora, participa y programa activamente actividades con los colegios e institutos locales, pues son sabedores de gran beneficio que supone el contacto con los libros en el proceso educativo de toda persona.
En una de las salas nos mostraron algunos videos sobre alguna de las actividades que realizan con los niños o participantes en actividades Erasmus como la que nos ocupa. Pudimos ampliar nuestro conocimiento sobre indumentaria tradicional, cómo se realiza y cómo se hacen talleres para que los habitantes lo conozcan y sigan teniendo esa conexión con su tradición. Así mismo también hemos podido ver algunos aspectos sobre la particular cerámica producida en la zona.
Tras los vídeos nos animan a realizar algunos bordados inspirados de los tradicionales rumanos.
No es algo demasiado difícil, aunque requiere algo de práctica, pero lo más importante es la paciencia y la constancia, puesto que nos han dicho que en la elaboración de una de las camisas tradicionales como las que pudimos ver en la crónica anterior se pueden emplear hasta seis meses de trabajo. Nos llama la atención que todos los niños, tienen contacto con este tipo de arte manual, pues o bien en el colegio o bien en la biblioteca, suelen elaborar trabajos de este tipo para hacer marcapáginas, letreros o simplemente decoración con motivo de las celebraciones de marzo relativas a la primavera o el día de la mujer y día de la madre.
Tras el taller de costura, salimos de la biblioteca y nos desplazamos muy cerca, al museo de arte contemporáneo de Valcea. Instalado en un edificio de los años cuarenta del siglo XX, propiedad de un personaje adinerado preocupado en hacer llegar el arte a todas las personas posibles, organizaba conciertos y fiestas en las que el arte era el tema principal. Perseguido por el gobierno comunista, se vio obligado a emigrar a Argentina. Tras la vuelta de la democracia, herederos suyos reclamaron la propiedad del edificio y la consiguieron, para posteriormente, venderla al ayuntamiento, que lo volvió a su destino inicial de difusión del arte. Actualmente, alberga obras de los más importantes autores modernos rumanos.
El aspecto del edificio convertido en sala de exposiciones resulta bastante curioso, y ya podemos apreciar algo de ese estilo arquitectónico neo-rumano que aprendimos ayer.
Tras el taller de bordado nos llama la atención este cuadro que representa precisamente una camisa tradicional, pero cuyo dibujo se ha transformado.
Las distintas salas dan cabida a un número mayor de obras que en principio se piensa que puede haber.
También tiene cabida la escultura, con una sala exclusiva a uno de estos autores.
Nos desplazamos ahora a la escuela de arte, donde podemos realizar una actividad consistente en colorear un cuadro, durante la elaboración aprendemos sobre arte, cubismo, cómo los distintos estilos pueden evolucionar a lo largo de la historia; centrados en el cubismo, el profesor nos refiere las influencias que Picasso tuvo para iniciar el cubismo, y la influencia que posteriormente, ha tenido su obra en otros artistas, la importancia del color, las distintas técnicas, las distintas expresiones que la pintura puede tener...
Cada uno ha sido libre de elegir los colores que ha querido, había ciertas reglas, como definir los sectores previamente dibujados y usar distintos tonos de los mismos colores, mezclando con blanco o negro según quisiéramos dar más luz u obscurecer los colores.
Ha sido una actividad relajante y muy constructiva, en la que hemos podido comprobar, el talento que todos llevamos dentro.
En esta escuela de arte también podemos encontrar un estudio de ensayo y grabación de música, desde música tradicional a música moderna, para todas las edades, también aulas para el estudio y práctica de otros instrumentos de manera individual.
El estudio de grabación está perfectamente dotado.
También pudimos ver salas de baile donde se enseñan tanto bailes tradicionales como ballet clásico.
También tuvimos ocasión de ver algunos alumnos trabajando sobre vidrio, llama la atención que trabajan desde la parte interior de lo que finalmente se ve, por lo que deben empezar en las capas más exteriores para ir superponiendo las inferiores, teniendo en cuenta que además el dibujo se presenta como reflejado en un espejo, lo de la derecha a la izquierda y viceversa.
Por último pasamos al taller de alfarería, donde podemos ver de primera mano la elaboración de la cerámica local, teniendo la oportunidad incluso de elaborar algunas piezas.
El hijo de quien nos enseña la escuela de arte se atreve también a trabajar con la arcilla y nos sorprende muy gratamente cuando, a mitad de trabajo y tras haber puesto alguien música, empieza a cantar una canción, es un momento muy bonito.
Nos parece increíble que se ha ya hecho hora de comer, y es que a pesar de haber estado haciendo un montón de cosas a lo largo de la mañana y no haber parado prácticamente, a todos nos ha pasado el tiempo sin darnos apenas cuenta.
Así las cosas, nos vamos a comer, aquí os dejo un plato típico de Rumanía, o por lo menos de esta zona, es una sopa de judías y sardina, servida dentro de un pan.
Es algo delicioso, muy bueno, os estaréis preguntando si al final la sopa, o el caldo se sale del pan, os digo que no , llega a humedecerse pero es lo suficientemente consistente como para absorberlo sin problema, de manera que el pan empapado se puede ir recogiendo con la cuchara para seguir comiendo, como os decía, una delicia.
El día no ha terminado, pero he aprovechado este rato para poder contaros todo esto, más adelante seguiré contando más cosas. Hasta entonces.
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